MIGUEL JIMÉNEZ|
EL PAIS
Entre la cárcel y la Casa Blanca; entre la campaña electoral y el banquillo—acusado de 91 delitos—, Donald Trump es el primer presidente estadounidense derrotado que vuelve a la carga. Su primer desafío, las primarias republicanas. Después, las elecciones presidenciales. Su victoria, cimentada en el proteccionismo y el nacionalismo, supondría un riesgo para la democracia de EE UU y su papel en el mundo. Él sigue huyendo hacia adelante